En aquél atardecer y viendo la montaña florecer
meditaba y recordaba, lo importante de tu ser,
escuchando la guitarra llorar y al mismo tiempo preguntar
¿no será un simple juego su forma de amar?
Pero calló la noche,
y el aire me dijo en su andar
disfruta el momento y ponte a imaginar,
que el amor no siempre llegará,
puede que este en peligro de extinción como las panteras
que sólo habitan en algún rincón.
La guitarra enmudeció
como si los acordes de pronto murieran
el lago, subió, no me dí cuenta
pues dormido abajo de un árbol estaba yo.
viernes, agosto 19, 2005
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1 comentario:
HI... quisiera saber si esto tiene que ver conmigo... total sabes que me haces feliz, aunque no estes aquí...
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