Un fantasma rondando tu habitación
dando tumbos aquí, golpes allá
penetrando por las paredes adornadas
pero que jamás logra ya entrar a tu corazón.
Rasgaduras en traje de gala
salpicado con gotas de locura
dejando perfume de amor por toda la sala
el rencor no da tregua ni afloja su atadura.
Adopto los bichos de tu cama como alimentación
cuidare de ti sin que notes ya mi presencia
de verdad ya no quiero causar ninguna molestia
aunque en ninguna vida aceptaré vivir con tu ausencia.
Ya sólo un fantasma soy en tu habitación
una sombra viviendo de tu respiración
sólo un espectro sin conciencia ni razón
divagando y haciéndote el amor únicamente en la imaginación.
jueves, marzo 23, 2006
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