miércoles, diciembre 07, 2005

(Pt. I) Me quieren cortar los dedos

Cuando comienzo a dibujar una idea en la cabeza no puedo parar y una necesidad de dejarlo por ahí tirado en algún lugar fuera de mi mente se convierte en una ansiedad que debo de calmar, de lo contrario la sensación se vuelve insoportable hasta el punto de coquetearle a la locura de una manera demasiado seductora.

No tengo la culpa de que me invadan las inconformidades del ser, estar, hacer las cosas como se viven a diario. Simplemente así las percibo y las reflejo como las procesa mi mente. La sangre comienza a trabajar de una manera que es difícil de explicar pero todo mi cuerpo se llena de esa sensación de insatisfacción con lo que tengo y querer hacer que las cosas marchen bien para todos, pero sobre todo para mí.

Nunca he pretendido ser un líder de opinión, cambiar al mundo, influir en las decisiones de la gente. Únicamente busco extirpar toda la basura que se deposita en mi cabeza con las vueltas de esta vida: escuelas, trabajos, gente, transporte, escoger, intentar, tareas, relaciones, creer… en fin… una eterna cadena maligna que aunque se cierre sólo trae como consecuencia volver al principio y así… nunca acabar… siempre tener que elegir.

¿Por qué a los mentores de esa cosa llamada televisión no los juzgan en algo como el purgatorio? ¿Por qué me quieren cortar los dedos? ¿Qué culpa tengo yo de estar descontento con esta vida? Mi tristeza sólo puede cantar en este idioma (las letras)… no lo puedo evitar. Es verdad que muchas ocasiones es irresistible evidenciar a la gente sin proponer nada… mi única intención es hacerles saber que ese error esta ahí… para que de ellos salga mejorar… pero… ¿Por qué me quieren cortar los dedos? Juro que jamás he querido hacerle daño a nadie… nunca… pero ¿Por qué me quieren cortar los dedos? ¿Qué acaso pretenden que viva por siempre callado? No podría… mi relación con la vida es esa… reventarle al supuesto “dios” sus errores en la cara y meterle una patada en el trasero cada vez que pueda. Hacerles chocar sus idioteces al sistema que cada vez se vuelve mas y mas deficiente… pero de ahí a lastimar a otro ser vivo… ¡jamás! Por eso sigo sin entender ¿Por qué me quieren cortar los dedos?

No tengo más armas que eso: un teclado, mi espacio, mi cabeza (que a veces es arma de doble filo) y un corazón que para hoy en día ya luce como jitomate pasado de hace meses… Tan sólo hago una pequeña petición: ¡por favor… no me corten los dedos!

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